"Interacciones" es un proyecto tan peculiar que logra a partir de una obra-objeto-manifiesto (profunda, movilizante, lúdica, experimental, consciente) poner en cuestionamiento una gran cantidad de formas, prácticas, identificaciones y definiciones a partir de un trabajo creativo comunitario alimentado por la potencia de sus ideadores.
Cuando Tomás Moro acuña el término “utopía” lo hace combinando los vocablos griegos οὐ y τόπος que significan, literalmente, “no lugar”, haciendo referencia a un lugar (una sociedad) que no existe en la tierra (un “no hay tal lugar”), a lo que podríamos entender como una sociedad ideal. Utopía ha ido convirtiéndose con el tiempo (y con la profundización del individualismo, el consumismo y el sometimiento social a gran escala) en sinónimo de lo imposible, de lo irrealizable. Pero el concepto de “no lugar” ha sido abordado a fines del s.XX desde un lugar muy diferente al del origen de lo utópico con la conceptualización que hace Marc Augé de los espacios “efímeros y provisionales, que sólo puede producir relaciones efímeras y provisionales”.

"Interacciones" ha hecho (y, con esta segunda edición, lo ha reafirmado) con los productos de la sobremodernidad una utopía realizable. Una utopía en tiempos de internet. Una utopía digital. Ha consolidado lo efímero en una obra cuyo formato es irrelevante y trasciende el propio resultado.
Materiales sonoros generados en pequeñas islas individuales -producidos a partir de consignas mínimas y arbitrarias- viajan en múltiples direcciones (y en forma de archivos digitales) para mezclarse entre sí en un collage lleno de sentido orgánico. La individualidad se diluye en pos de un espacio artístico comunitario y casi anónimo, un espacio transversal. Una obra colectiva dirigida desde la libertad.
En la obra utópica de Francis Bacon "Nueva Atlantis" ("The New Atlantis", 1623) el anfitrión le comenta al visitante:
“Tenemos casas de sonidos, donde practicamos y demostramos todos los sonidos y su generación. Tenemos armonías que ustedes no tienen, de intervalos sonoros de cuartos de tono y aún menores. Diversos instrumentos de música que te serán desconocidos, algunos más suaves que los que ustedes tienen, junto con campanas, cascabeles y timbres que son delicados y dulces. Podemos representar pequeños sonidos como grandes y profundos; asimismo a los grandes como atenuados y agudos. Representamos e imitamos todos los sonidos articulados y las letras y las voces y notas de animales y pájaros. Tenemos ciertos artilugios que permiten al oído escuchar profundamente; enviamos una voz allí y vuelve más fuerte. Tenemos medios para transmitir sonidos por tuberías para enviarlos en extrañas direcciones y sentidos.”

"Interacciones" es una gran casa de sonidos en contínua expansión. Cuando escuché el primer CD del proyecto (conociendo yo la forma en la que se había producido y las dificultades de organización y el trabajo que implicó) me sorprendió (y me alegró) enormemente como el resultado era muchísimo mas que un compilado de buenas intenciones y buenos sonidos. La obra resultante tiene vida propia, los “retazos” estan totalmente imbricados, la música es orgánica. Y cada vez que se la escucha la obra se reconfigura.
"Interacciones" es la celebración de un no lugar utópico realizable, un no lugar que representa la identidad, la historia y las relaciones. Otra manifestación del poder trascendental del arte comunitario. Un humilde espacio de amor hecho sonidos.

Ernesto Romeo, octubre de 2018.